Las manchas blancas en la piel no son más que cambios de pigmentación en las capas superficiales de esta. Muchas son sus causas, desde vitíligo hasta infecciones fúngicas, y al menos todas las personas han tenido una en su vida.
Las manchas blancas en la piel pueden aparecer en cualquier lugar y a cualquier edad, siendo un motivo de preocupación frecuente en cualquier consulta médica. Para muchos no suele ser mayor problema, pero para otros, puede representar apenas el primer signo de una enfermedad más grave.
A continuación, descubre las causas más comunes, las localizaciones más frecuentes, y las innovaciones terapéuticas en nuestra clínica para curarlas.
Causas de las manchas blancas en la piel
Las manchas en la piel pueden ser consecuencia de una gran variedad de situaciones, desde enfermedades hasta cambios en los vasos sanguíneos o variaciones en la melanina, el pigmento que le da color a la piel.
Entre las causas destacan:
- Cambios en la cantidad de melanina producida por la piel.
- Infecciones por hongos o bacterias en la piel.
- Enfermedades inflamatorias.
- Cambios en los vasos sanguíneos, sobre todo capilares.
- Exposición prolongada al sol.
- Cambios hormonales.
- Tomar ciertos medicamentos.
Por lo general, los cambios en la tonalidad de la piel suelen ser estéticos y no provocan ningún problema. Sin embargo, cualquier anormalidad cutánea debe ser evaluada por un dermatólogo para confirmar o descartar alguna lesión peligrosa.
Tipos de manchas blancas en la piel
Dermatitis atópica
La dermatitis atópica es una enfermedad inflamatoria de la piel. Provoca enrojecimiento y comezón, que a menudo lleva al rascado frecuente y posterior formación de heridas y costras.
El rascado frecuente junto con la inflamación son los principales causantes de manchas blancas en la piel. Además, entre sus variedades figura la pitiriasis alba, un trastorno conocido por hacer que la piel se descame y deje parches blanquecinos, sobre todo en quienes tienen la tez oscura.
Ambas condiciones se dan con mayor frecuencia en niños y adolescentes, aunque las lesiones pueden persistir hasta la adultez.
Candidiasis superficial
La infección por cándida es otra causa común de manchas blancas en la piel. La candidiasis cutánea aparece sobre todo en áreas húmedas y cálidas, como los pliegues axilares o de la ingle, y se debe al crecimiento excesivo del hongo Cándida albicans en la dermis.
Los síntomas incluyen:
- Manchas blanquecinas.
- Erupciones rojas que crecen en tamaño y generan mucha comezón.
- Infección de los folículos pilosos, similar a una foliculitis.
En estos casos lo mejor es acudir a un dermatólogo para dar con el mejor tratamiento tópico, ya que algunos hongos son resistentes a los antimicóticos de farmacia.
Tiña versicolor
La tiña versicolor es otra infección micótica de las capas superficiales de la piel. Es causada por el hongo Malassezia furfur, que generalmente existe en pieles sanas, pero a veces se transforma en un patógeno y causa la enfermedad, sobre todo en ambientes cálidos y húmedos.
Las manchas blancas de la tiña versicolor se ven como parches de bordes bien definidos con escamas en su interior. A veces pueden tener un tono más claro u oscuro que la piel que la rodea, y no se oscurecen luego de exponerse al sol. El parche de piel con tiña versicolor además puede picar, inflamarse o transpirar.
Hipomelanosis guttata
La hipomelanosis en gota (guttata) es un trastorno pigmentario de la piel que suele darse después del verano. También se asocia con la genética y tomar el sol por muchas horas.
Las lesiones son blanquecinas y tienen forma de lenteja, pudiendo alcanzar hasta 2 o 3 cm de diámetro, y aparecen especialmente en las zonas expuestas al sol, como los antebrazos, las piernas, o el escote.
Estas manchas por lo general no causan mayores molestias, pero son un claro signo de fotoenvejecimiento debido al deterioro de las células productoras de melanina, los melanocitos.
Para descartar el cáncer de piel o cualquier lesión maligna, toda mancha con características similares a la hipomelanosis debe someterse oportunamente a un examen dermatológico riguroso.
Vitíligo
El vitíligo, una enfermedad poco frecuente, pero muy conocida, consiste en un trastorno de la pigmentación de la piel donde existen parches blanquecinos causados por falta de melanina.
Las manchas del vitíligo son típicas. La piel tiene características normales (sin inflamación ni descamación) pero pierde su color habitual, haciéndose más clara y con bordes bien definidos pero irregulares.
Con frecuencia afecta en el rostro, brazos, codos y rodillas, aunque con el tiempo puede avanzar y perjudicar todo el cuerpo. También se asocia a otras enfermedades inmunológicas, como enfermedades de la tiroides, de Addison, o diabetes.
¿Cómo evitar las manchas blancas en la piel?
Todo profesional de la dermatología concuerda en que, para mantener la piel sana, debes seguir los siguientes consejos preventivos:
- Protégete contra el sol. Las radiaciones ultravioletas son las principales causantes de daño en la piel. Con el tiempo, los rayos UV producen cambios en las células de la piel, haciendo que produzcan más o menos melanina, o predisponiendo a lesiones malignas.
- Lleva ropa holgada y fresca. Durante los días calurosos es mejor que lleves ropa holgada. La humedad y la acumulación de partículas en la ropa favorece el crecimiento de hongos como la Cándida o la Malassezia que, como sabes, infectan la piel y producen manchas.
- Sigue una rutina de higiene dermatológica. Ciertos principios activos en cremas o sérums son beneficiosos para proteger la piel del daño solar y estimular la regeneración celular. Consulta con un dermatólogo acerca de los ingredientes que más se adapten a tu tipo de piel.
- Utiliza despigmentantes cosméticos. Un despigmentante cosmético puede disminuir la apariencia y tamaño si la mancha es pequeña y poco perceptible. Consulta con un dermatólogo sobre los despigmentantes ideales para tu tipo de piel y lesión.
- Opta por tratamientos médicos. Si a pesar de haber seguido estos consejos, las manchas no desaparecen o, por el contrario, empeoran, consulta con un dermatólogo para iniciar un plan terapéutico de procedimientos médicos enfocados a despigmentar.
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